Es difícil de creer, pero estas cosas siguen ocurriendo.

CUESTA CREER QUE MANTENGAN EL ATAVISMO VIKINGO . . . . miren estas fotos

....DINAMARCA UNA VERGÜENZA!!!!
DENMARK, WHAT A DISGRACE!!!!! ( FEROE ISLANDS)
















Duele ver como destruimos y nos acabamos todos los regalos que Dios nos da...

DINAMARCA: UNA VERGÜENZA, HAY QUE DIFUNDIRLO. ESPERANDO QUE LLEGUE A ALGUIEN QUE PUEDA HACER ALGO AL RESPECTO.


¡¡¡¡¡OJO NO CABE DUDA QUE NO HAY PEOR BESTIA Y/O ANIMAL EN ESTE PLANETA QUE EL PROPIO SER HUMANO!!!!


AUNQUE PAREZCA MENTIRA AÚN HOY EN DÍA SE SIGUE REALIZANDO CADA AÑO ESTA BRUTAL, DANTESCA, SANGRIENTA MASACRE EN LAS ISLAS FEROE, QUE PERTENECEN A DINAMARCA.


UN PAÍS SUPUESTAMENTE 'CIVILIZADO' Y QUE PERTENECE A LA UNIÓN EUROPEA.

PARA MUCHOS ES DESCONOCIDO ESTE ATENTADO A LA VIDA, A LA SENSIBILIDAD, A TODO.


EN ESTA MASACRE SANGUINARIA PARTICIPAN LOS MOZOS PARA 'DEMOSTRAR' QUE ENTRAN EN LA EDAD ADULTA (¡!) ES ABSOLUTAMENTE INCREÍBLE QUE NO SE HAGA NADA PARA EVITAR ESTA BARBARIE QUE SE COMETE CONTRA LOS CALDERONES, UN DELFÍN INTELIGENTÍSIMO QUE TIENE LA PARTICULARIDAD DE ACERCARSE A LAS PERSONAS POR PURA CURIOSIDAD.


DIFÚNDELO POR TODAS PARTES, POR FAVOR


Holanda ha construido unas casas que flotan y Venecia ha decidido protegerse de las inundaciones instalando murallas bajo el mar y la laguna. La Agencia Europea de Medio Ambiente (EEA) ha resaltado en su informe Impactos del cambio climático en Europa la necesidad de adaptarse lo antes posible a las consecuencias del calentamiento global que ya no podemos remediar. "El régimen ecológico mundial posterior a Kioto requiere tanto la mitigación de las emisiones de CO2 como la adaptación", se asegura en el informe.
Holanda y Venecia representan dos de estos casos irremediables que sí se han preparado para el desastre. Holanda tiene un tercio de su territorio bajo el nivel del mar; la ciudad de los canales se hundió el siglo pasado unos 24 centímetros. El llamado sistema Mose pretende salvar la ciudad de su inexorable hundimiento. Es una de las obras de ingeniería más ambiciosas de Europa. Se trata de un sistema de diques que permitiría cerrar la laguna de Venecia al mar y protegerla de las inundaciones que afectan de contínuo la ciudad. La infraestructura consiste en 72 compuertas hundidas en el mar que emergen cuando el nivel del agua sube un metro, lo que ocurre aproximadamente siete veces al año.
Por lo que se refiere a Holanda, sus casas flotantes han sido construidas por la empresa Dura Vermeer expresamente para probar su habitabilidad. Desde hace cuatro años, en la localidad de Maasbommel (Gelderland) 32 familias viven sobre el río. Sus casas están, normalmente, en seco. Pero cuando sube la marea flotan sin riesgo de perder la electricidad o la conexión a Internet. El lugar fue elegido expresamente para investigar si es posible vivir sobre las aguas convulsas del cambio climático. Y es que la subida del nivel del mar provocará la pérdida del 2% del PIB debido a la escasez de agua dulce, daños en la agricultura y la industria pesquera, la interrupción del turismo o la reducción de la seguridad energética, según publicó el Banco Mundial a mediados de agosto en su guía de ciudades resistentes al clima.
Pero el ejemplo más desesperado de adaptación no está en el viejo continente. Un atolón del pacífico, las Islas Tuvalu, formación coralina de 25 kilómetros que en su punto más alto se levanta cinco metros sobre el nivel del mar, se extinguirá en las próximas décadas bajo las aguas. Allí viven 11.300 personas. Por eso han planeado un éxodo masivo a Nueva Zelanda o Australia, las dos naciones desarrolladas de la región


Ventajas para el Norte, catástrofes para el Sur
- Región mediterránea
-Disminuirán las lluvias
-Descenderá el cauce de los ríos y aumentará al mismo tiempo el riesgo de incendios forestales
-Menos producción de cultivos
-Se incrementará la demanda de agua para la agricultura
-Aumentará el riesgo de desertificación
-Habrá menos energía hidroeléctrica
-Se producirán más muertes por olas de calor
-Mayor transmisión de enfermedades infecciosas
-Una parte de los turistas modificará sus hábitos y pasará el verano en otros lugares
-Se registrará una mayor pérdida de la biodiversidad

- Áreas de montaña
-Subirán las temperaturas
-Habrá menor masa glaciar
-Disminuirá la capa subterránea de hielo
-Más riesgo de desprendimientos de rocas
-Las plantas y animales cambiarán sus hábitat a las zonas más altas.
-Descenderá el turismo de nieve
-Mayor riesgo de erosión del suelo
-Aumentará la amenaza para las especies que están ya en peligro de extinción

- Europa central y del Este
-Más temperaturas extremas
-Menos precipitaciones en invierno
-Aumenta el peligro de desbordamientos de los ríos durante el invierno
-Subirá la temperatura del agua
-Se registrará una mayor inestabilidad en la producción de cultivos
-Incremento de los incendios forestales

- Norte de Europa
-Menos nieve y menos lagos y ríos cubiertos de hielo
-Se preveen más desbordamientos de los ríos en esta zona
-Las especies emigrarán aún más al Norte en busca del frío para el que están adaptadas
-Habrá más y mejores cosechas
-Mayor producción de energía hidroeléctrica
-Más afluencia de turistas


El estrés del agua quiere decir sequía y desertificación. Significa que en el futuro, a nuestra lista de preocupaciones, se añadirá la falta de agua. Pero también el exceso: inundaciones y crecidas de ríos. Es la expresión que utiliza la Agencia Europea de Medio Ambiente (EEA) para calificar lo que va a sufrir en las próximas décadas España y todos los países de la cuenca del Mediterráneo.

Fuente: El País
La Unión Europea ha publicado un informe llamado Impactos del cambio climático en Europa que especifica las convulsiones que vivirá el viejo continente por el calentamiento global. El estudio analiza la cantidad del agua que el hombre ha necesitado entre 1975 y 2006 y, por otro lado, muestra la evidencia de que las lluvias serán muy intermitentes en Europa. Lloverá poco y se necesitará más agua. "En el mismo período ha habido un significativo incremento en la demanda de agua en España (entre el 50% y el 70%) y en las áreas mediterráneas", asevera el informe. Y las predicciones de futuro van en línea ascendente. "La demanda crecerá cada vez más, especialmente en el sur donde la necesidad de agua para la agricultura es mayor. Con ella, se desarrollará una competición por este bien entre los distintos sectores (turismo, agricultura, energía) y usos".
En promedio, la exigencia de agua en todos los países de Europa ha crecido al rededor de 50 milímetros cúbicos por hectárea al año pero, en algunos casos como en el centro de España, Italia, Grecia, el Magreb, el sur de Francia y Alemania la cifra oscila entre 150 y 200 metros cúbicos por hectárea al año. Y, como se prevé que las lluvias, se reducirán se necesitará regar más. Por eso la falta de agua causará un impacto negativo tanto en términos económicos como en ecológicos. Además, en el Mediterráneo se ha observado un creciente déficit del agua en los últimos 32 años.
Aunque el informe vaticina desertización para España, el estudio tampoco nos libra de los desbordamientos de los ríos. Habrá un incremento porque la alternancia entre períodos de sequía y precipitaciones torrenciales hace a España más propensa a estas inundaciones. Para 2080 pronostica que entre 2000 y 4000 personas se verán afectadas por las inundaciones en las zonas costeras por la subida del nivel del mar en Andalucía, Galicia, las Islas Baleares y Asturias. La región más afectada será el País Vasco: entre 4000 y 8000 personas podrán ser víctimas de la subida del mar. Países como Reino Unido, Sicilia o Grecia podrán ver afectada a gran parte de su población (entre 8000 y 50.000 personas). El planeta ya está experimentando una subida de las temperaturas de 0,8 grados centígrados por encima de los niveles preindustriales y el nivel del mar ha crecido 3,1 milímetros al año en los últimos 15 años.
Para mitigar todos estos problemas el informe apuesta tanto por la reducción del CO2 como por la adaptación a las consecuencias del cambio que ya no se pueden remediar. "El 90% de todos los desastres que han sucedido en Europa desde 1980 están directa o indirectamente relacionados con el clima y representan el 95% de las pérdidas económicas causadas por catástrofes", señala el informe.
Para evitar estas pérdidas se pone tres metas: la primera, una mayor vigilancia, monitorización y estudio de los cambios a nivel internacional; la segunda, estabilizar el clima para 2020 por debajo de los dos grados centígrados con respecto a los niveles pre industriales "para evitar consecuencias irreversibles en la sociedad y en los ecosistemas". Por último, hace hincapié en la adaptación.
Afirma que uno de los grandes retos de España de todo el Mediterráneo en adaptación es la diversificación del turismo en otros sectores. El estudio asegura que la subida de la temperatura hará marcharse a los turistas más al norte, en busca del mismo clima que antes se gozaba en España. Por eso, para no perder dinero, será imprescindible invertir en otros sectores.


Abstenerse de comer carne al menos un día a la semana puede ser un sacrificio personal eficaz para combatir el cambio climático. Ésta es la recomendación que acaba de proponer el doctor Rajendra Pachauri, presidente del Panel de Expertos del Cambio Climático de Naciones Unidas (IPCC), y ganador del Premio Nobel de la Paz en 2007 junto al ex vicepresidente de EEUU, Al Gore.

Fuente: El Mundo
En declaraciones que publicó ayer el dominical británico The Observer, Pachauri explica que reducir el consumo de carne puede contribuir a la lucha contra el calentamiento global porque la crianza de ganado provoca emisiones de gases de efecto invernadero, deforestación y otros problemas ambientales.
Pachauri, que acaba de ser reelegido como presidente del panel del cambio climático de la ONU para un segundo mandato de seis años, considera que resulta más fácil cambiar los hábitos alimenticios que los de transporte, dado el fuerte apego al coche particular.
Por esa razón, el doctor Pachauri, que es vegetariano, recomienda «renunciar a la carne durante un día a la semana, inicialmente, y después ir reduciendo a partir de ahí». A su juicio, ésta es la opción «más atractiva» para que cualquier individuo pueda contribuir con carácter inmediato a la reducción de emisiones.
La FAO, la agencia de la ONU para la agricultura y la alimentación, estima que la producción de carne es responsable de casi una quinta parte de las emisiones de gases de efecto invernadero.
Eso se debe tanto a la producción de piensos para el ganado como al hecho de que los rumiantes, particularmente las vacas, emiten metano, que es 23 veces más perjudicial que el CO2 como agente del calentamiento global. Además, la agencia alimentaria ha advertido que para mitades de este siglo, se calcula que el consumo de carne se duplicará.